La acuarela es una técnica artística que ha cautivado a artistas y amantes del arte desde tiempos inmemoriales. Esta forma única de expresión permite la creación de obras delicadas utilizando pigmentos suspendidos en agua.
La acuarela, con su rica historia y versatilidad, sigue siendo una forma de arte muy apreciada hoy día. Si quieres profundizar en el desarrollo de esta técnica, no te pierdas cinco curiosidades sobre la acuarela:
- Egipto, Mesopotamia y China, los orígenes de la acuarela:
Aunque los vestigios históricos son escasos, los antiguos egipcios ya experimentaron con esta técnica hacia el siglo III a.C. para la elaboración de manuscritos y ornamentos en papiros. Sin embargo, es en Extremo Oriente durante el siglo I a.C. cuando aparecen las verdaderas acuarelas como las conocemos hoy. Y esto se produce al incorporar el papel, que se descubre en China en esta misma época, y que se convertirá en el soporte por excelencia de esta técnica.
- ¿Cómo escoger el papel de la acuarela?
El papel de la acuarela está compuesto de agua, celulosa y fibra de algodón en diferentes porcentajes siendo mejores, y de mayor calidad, los que llevan un mayor porcentaje de algodón. Por otro lado, debemos tener en cuenta el papel escogido, cuyo mayor o menor gramaje irá en función de la cantidad de agua y acuarela que se vaya a utilizar en el proceso creativo. Por ejemplo, un papel de grano satinado tendrá como resultado una acuarela con una textura más lisa; el papel de grano fino es el más utilizado porque es suave y perfecto para trazos finos, sin embargo, el papel de grano grueso es más tosco y dificulta la realización de detalles y trazos delicados.
- El color blanco no existe en la acuarela.
Para “pintar” de color blanco con acuarela, basta dejar esa superficie del papel sin pintar, tal cual. Porque en la acuarela el blanco no existe. Y, ¿cómo se aclaran entonces los colores?, te preguntarás. Se hace diluyendo el pigmento con más, o menos agua.
- Una técnica itinerante: la invención de la caja de acuarelas.
Coincidiendo con la invención de las pastillas de acuarela en 1766 gracias a William Reeves, y de la creación de la caja de acuarelas en 1785, muchos jóvenes artistas comenzaron a interesarse cada vez más por esta técnica que, de forma fácil y cómoda, les permitía “transportar” el estudio al aire libre en un estuche compacto y portátil. Se originó una verdadera revolución en la pintura. Los artistas, lejos de sus estudios, comenzaron a capturar la esencia de la naturaleza, de la luz y el color, en tiempo real. Este cambio tuvo un impacto profundo en el mundo del arte del siglo XIX, en el que impresionistas como Monet y Renoir adoptaron la acuarela como medio preferido para capturar la atmósfera y su efímera luz.
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Iniciarte en el mundo de la acuarela puede ser una experiencia apasionante, pero como cualquier otra técnica artística, también puede presentar algunos desafíos. La técnica de la acuarela consiste en aplicar capas semi-transparentes, para después ir superponiendo y conseguir colores más oscuros. Sin embargo, si fuera tan sencillo, cualquiera sabría pintar con acuarela y lo cierto es que es un técnica que requiere conocimientos y trucos específicos.
La mejor manera de explorar esta técnica, así como descubrir otras técnicas artísticas fascinantes, es inscribiéndote en clases de pintura especializadas.
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